Tras la celebración de su cumbre en Francia y Alemania, la empresa aeroespacial apunta a disminuir las emisiones de carbono y apuesta por el hidrógeno. Además prepara nuevas tecnologías para la alta demanda de viajes.
Con la mente puesta en el cuidado del medioambiente y ante un constante aumento del número de vuelos año a año, sumado a la alta demanda de aviones de fuselaje para los próximos 2024, la empresa Airbus avanza en el desarrollo de naves menos contaminantes y en la implementación de nuevos combustibles.
Una de las principales ‘cartas’ en ese plan es la construcción de aviones con hidrógeno cuyo desarrollo de motor fue recientemente anunciado en la última cumbre de la compañía en Toulouse, Francia.
La iniciativa responde a la meta que se había puesto el propio sector de introducir un avión comercial impulsado por hidrógeno para 2035.
“El sistema es una de las varias opciones que se están considerando para un posible avión de cero emisiones basado en el hidrógeno”, expresaron voceros de Airbus. Hasta el momento se trata de un hecho único, ya que esta es la primera vez que el mayor fabricante de aviones del mundo se dedica directamente a desarrollar tecnología de motores.
De esta manera, el hidrógeno se convierte en la fuente ya que las celdas de combustible lo utilizan para generar electricidad para las centrales eléctricas. Un enfoque alternativo basado en la combustión de hidrógeno líquido en motores a reacción más convencionales depende de una fuerte refrigeración en tanques más grandes y pesados.
Mientras tanto, la empresa avanza con la construcción de la estación de hidrógeno en el aeropuerto de Toulouse-Blagnac, la cual se completó a principios de año y los sistemas de producción, almacenamiento y distribución se encuentran actualmente en las pruebas finales. La estación, que está prevista que entre en servicio a principios de 2023, tendrá una capacidad para producir alrededor de 400 kg de hidrógeno por día, lo que brindará la posibilidad de alimentar a unos 50 vehículos de transporte terrestre.
“Todos estamos decididos a hacer realidad los aviones de emisiones cero”, afirmó Glenn Llewellyn, vicepresidente y especialista en la división Zero Emission de Airbus.
En este aspecto, desde la empresa renuevan su postura a favor de un fuerte aumento de la disponibilidad de combustible de aviación sostenible (SAF, por su sigla en inglés), que según muchos expertos representa la vía más prometedora para frenar las emisiones a corto plazo.